martes, 30 de noviembre de 2010

SOY GRIS

Me gustan las canciones tristes, pero no las baladas.

Me gusta pasear por las calles desiertas.

Me gustan los pueblos pequeños, deshabitados, con calles estrechas y oscuras.

Me gusta el negro, y casi siempre visto así.

Me gustan los días de lluvia desde mi cama.

Me gustan las películas de miedo.

Me gusta la fotografía en blanco y negro.

Me gustan los poemas que hablan de amores rotos.

Me gusta el frío de una tarde de invierno nevada en un refugio de montaña.

Me gusta el silencio cuando no lo puedo mejorar.

Me gusta que mi sonrisa no se borre ni cuando me parten la boca.

Me gusta tener mi mundo tan lleno de colores...

domingo, 10 de octubre de 2010

NUEVA VIDA

Desde el verano he ido a un ritmo descontrolado, fruto de la mayor energía que dispongo ahora. Me he descontrolado en muchos aspectos pero sobretodo porque he recuperado los "ya", "siempre" y "todo" que tenía tan bien aprendidos.

Los frentes abiertos, creo, son dos:las mujeres y el piso.

En esas dos luchas he vuelto a olvidarme de mi. Y como es natural he salido perdiendo. Perdiendo porqué me he contracturado y porque hace días q ando muy cansado y desubicado.

Se que la solución no esta ahí afuera. Se que no se arreglará solo con instalarme en mi casa. La solución la tengo delante de las narices y solo tengo que hacer una cosa: mirarme dentro y hacer lo que me pida el cuerpo.

Ahora mismo mi cuerpo me pide descanso y tranquilidad. Relax y estabilidad.

Lo primero lo tendré en casa y tardará lo justo hasta que tengamos gas.

Lo segundo no lo encontraré donde estoy buscando. Ninguna chica me lo va a dar. Tendré que encontrarla dentro de mi.

Hoy empiezo a buscarla.

lunes, 20 de septiembre de 2010

A SOLAS

Ayer me quedé esperando.
Hoy sigo sin saber que es lo que esperaba, ya que no tenía ningún compromiso.
Pero aún así, yo esperaba.
Es una sensación que me incomoda mucho y que no me gusta sentir.
Es un problema más a resolver.
Espero y espero, sigo esperando y no se que es lo que ha de llegar.
Intenté llenar los huecos, pero solo con aire no se llenaban.
Me faltaba la materia para rellenarlos.
Espero. Pero ya empiezo a cansarme de estar parado, de dejar que las cosas lleguen a mi.
Me gustaría salir a buscarlas, ir a su encuentro. Pero ni siquiera se que tengo que encontrar.
Espero y espero, y ya empiezo a desesperar...

domingo, 1 de agosto de 2010

PENSAMIENTOS EN MI MOVIL

Solo en el bar y camino de mi segunda cerveza, sabía que no acabaría demasiado bien. También sabía que fumaba demasiado, pero era una cosa que me costaba reprimir enormemente. Simplemente dejé de pensar y continué en esa misma línea.



Pretendemos encontrarnos con gente que ondee carteles similares a los nuestros, pero no es así. Sigo sin comprender un mundo que se me antoja complejo. Pero creo que de esa complejidad soy el único culpable. Yo soy quien le busca sentido a todo, en vez de buscar sentido a lo que importa: yo y lo que quiero hacer.



Veo a gente sola y acompañada y en ningún caso me siento mejor o peor. Solo siento unas irrefrenables ganas de mandarlo todo a tomar por culo.



Pronto estarás de vuelta.

Pronto estarás a mi lado.

Pronto volveré a ver como tus ojos

me miran desde la distancia

mientras tus pasos te alejan de mi.

martes, 29 de junio de 2010

CONTRAPOSICIÓN

Atravieso momentos altamente contrapuestos.

Situaciones tan dispares que me llevan a sentirme muy contrariado.

Es curioso como he desarrollado un sistema a través del cual soy capaz de castigarme cuando soy feliz a la vez que no acepto el dolor de la tristeza.

En tan rocambolescas situaciones, es lógico que no esté a gusto en ningún momento.

Acabo de pasar por uno de los mejores momentos de mi vida. Por un momento me he sentido libre. He hecho y he dicho todo aquello que me apetecía y en ningún caso he mirado las consecuencias ajenas.

He disfrutado de cada minuto como si fuera el último, saboreándolo, sintiéndolo, haciéndolo mío.

He llegado a alcanzar un nivel de complicidad como en pocas ocasiones he tenido. He sido yo y no me he sentido rechazado. Y eso me ha hecho sentir más vivo que nunca.

A la vez, he experimentado una sensación de pérdida brutal. He notado como una parte de mi se quedaba desierta, yerma.

Tengo la sensación de estar muy solo, incluso cuando estoy entre un tumulto.

Como es posible sentirse la persona más afortunada al mismo tiempo que la desdicha cubre cada parte de mi ser.

Todavía quedan reductos de esa forma de ser tan destructiva.

Tiempo y paciencia, nada más.

martes, 8 de junio de 2010

DONDE ME LLEVEN MIS PASOS

En múltiples ocasiones, el hombre, se encuentra que sus pasos le han llevado ante un cruce de caminos.

Ante tal disyuntiva, se ve obligado a escoger. El camino de la derecha, el camino de la izquierda o el camino del centro.

Y entonces el hombre piensa que tal vez el camino del centro sea el mejor, ya que es la continuación del que venía siguiendo.

Y se dice “¿si hasta ahora no ha sido tan malo, porque tiene que serlo ahora?”
Pero sabe que eso no funciona según suposiciones y es entonces cuando se pregunta de nuevo “¿Por qué no elijo uno de los caminos, mañana vuelvo a este cruce y elijo el segundo, para que pasado regrese al punto en el que me encuentro hoy y entonces escojo el tercero?”
Pero sabe en el fondo que eso no es posible, porque sabe que una vez que se elije un camino, la encrucijada desaparece, se diluye para no volver jamás. Porque esos caminos son la vida del hombre y como ese hombre bien sabe, no se puede deshacer la vida.

Solo podemos escoger en cada momento según nuestro corazón y aprender de cada paso que damos.

Porque el camino del centro no siempre es el más recto hasta nuestra meta.

martes, 18 de mayo de 2010

LA MOCHILA EN LA CUNETA

Hoy he comenzado a caminar, dando pasos sin tener una dirección concreta.

Simplemente voy vagando por las calles.

Se ha puesto a llover, y yo sin paraguas, sencillamente me he subido el cuello de la chaqueta, y un tanto cabizbajo he continuado con mi errático camino.

Solo llevo conmigo una pequeña mochila, lo suficiente para guardar cuatro recuerdos básicos.

Las gotas de agua se confunden en mi cara con las lágrimas que mis ojos dejan caer desde ayer.

Es un llanto de alegría y de temor, de liberación y de duda.

Me siento como el día, nublado, sin poder ver el sol que hay detrás. Siento pesadez en mis pensamientos, pero a la vez una fuerza descomunal que me empuja hacia delante.

No se a donde voy, ni si este camino que al azar he escogido me llevará a un buen sitio, pero de lo que no tengo ninguna duda es que eso no es importante ahora.

Ahora solo me basta con la certeza de saberme dueño de mis pasos.

No importa el destino ni la dirección.

Ahora me noto liberado de un gran peso que portaba encima.

Al mismo tiempo, mi cuerpo, acostumbrado, hecha de menos esa carga.

Pero eso no es importante, porque estoy seguro que aprenderé a caminar de nuevo.

Es cuestión de tiempo que mi cuerpo se acostumbre a descubrir todo lo que tenía olvidado.

Estoy cansado sin llegar a estar agotado y a la vez estoy muy feliz sin llegar a la euforia.

Se que han de llegar días de reflexión, pero mientras tanto, sin forzarlos a aparecer, yo continuaré caminando sin rumbo pero con paso firme, dejándome acariciar por todas las nuevas sensaciones que me acompañan en esta nueva etapa de mi vida.

Siento la necesidad de estar aislado de todo, de todos. Pero a la vez hay un sentimiento de soledad tan grande que me empuja a estar rodeado de gente y hacer cosas sin parar.

Tal vez sea porque hoy es realmente el primer día que he estado a solas conmigo mismo.

Me gusta estar solo. Siempre me ha gustado. Antes por ser un mecanismo de defensa y ahora por ser un deseo.

Aunque la verdad es que no lo llevo demasiado bien. Es complejo estar solo, y más aún cuando se está aprendiendo.

Soy fuerte y se que podré, empujado por un único pensamiento, curarme, salir de esta. Y eso se que solo lo puedo hacer solo.

Me encanta notar la sensación de felicidad que me invade al estar totalmente solo y poder llegar a reírme a carcajada, sin esperar que nadie lo comparta conmigo, sin sentirme extraño porque no hay nadie para compartir la risa conmigo. Solo yo, mi risa y el momento que lo han provocado. Y me encanta saber que no necesito de nadie para poder reírme más todavía.

martes, 20 de abril de 2010

EL POETA

Siendo hombre fui poeta,

que escribía poemas sin versos

y versos sin rima.

Eran versos de amor

que hablaban de tristeza,

de las penas mas sentidas

por un amor infinito.

Imposible era ese amor,

pues teniéndolo moría

y faltando no vivía.

Siendo poeta fui hombre,

que quería sin amor

a un amor infinito,

mas corazón no tenía

tras haberlo perdido amando.

Siendo un hombre soy poeta

y con los mas sentidos versos

le canto mi amor intenso

a esa persona infinita.

lunes, 12 de abril de 2010

EL PUZZLE QUE NUNCA ACABO

El mundo va muy deprisa. A veces me siento como la pieza de un puzzle que se ha caído en otra caja y por más que intenta unirse con las demás no lo consigue.

Esa sensación de frustración viaja conmigo, de la mano, como un incansable compañero de viaje.

El mundo va muy deprisa, y cuando intento ir a su ritmo me agoto, porque no es el mío, porque no me siento a gusto con él.

Me cuesta disfrutar de las cosas, porque casi siempre estoy caminando a un ritmo que me impide ver lo que me rodea. Además, porque vuelvo a estar pensando en la meta siguiente, antes, mucho antes siquiera de alcanzar la que estoy buscando.

Y eso me agota.

Lo más gracioso, o tal vez lo más triste, es que se como se para. Lo he hecho en otras ocasiones.

Pero...¿que ha cambiado esta vez?. Será que conozco la teoría pero no aplico la práctica. Se lo que tengo que hacer pero espero que se realice por si mismo, mientras yo sigo tumbado en el sofá.

El mundo no funciona así. Mi mundo no puede funcionar así. Y eso es lo que se está encargando de decirme mi cuerpo, con este catarro que arrastro demasiado tiempo ya.

De nuevo vuelvo a cargar todo a la espalda. Lo que pasa es que cada vez, mi espalda puede soportar menos peso.

Llegué a estar bien y por no saber disfrutar del momento lo eché todo por la borda otra vez. Y suena derrotista, pero es que lo que siento es fracaso más que derrota.

Reconozco que me he dejado vencer por los sentimientos tan fuertemente arraigados en mi. Que rocé con la punta de mis dedos un lugar maravilloso y que al volver a la realidad que he conocido en los últimos años, caí en una gran frustración, sintiendo que la lucha no había merecido la pena.

Lo que todavía no he acabado de entender, o mejor dicho, de asimilar y poner en práctica, es que esto forma parte de la vida, de mi vida.

Quiero decir que no he entendido que nuestras vidas son fluctuaciones entre estados de ánimo de lo más contrarios. Y que precisamente eso es lo que nos hace ser grandes y crecer.

Pero yo no lo comprendo. Porque no estoy feliz, estoy eufórico. No estoy triste, estoy deprimido. Y los términos intermedios son los que no llego a disfrutar, porque no los comprendo.

Una vez no hace demasiado estuve en ese estado intermedio. A día de hoy me parece que fue un sueño.

Y hasta que no comprenda que lo viví realmente y que lo puedo hacer siempre que quiera, me quedaré vagando en estos estados tan contradictorios, tan destructivos, que poco a poco me van quitando la vida.

La pieza del puzzle no encaja porque no me fijo en como son las demás piezas que me rodean y las invento en mi imaginación, siempre más confortable que la realidad, siempre más sencilla, pero siempre más dañina y destructiva conmigo mismo.

viernes, 1 de enero de 2010

EL DIA DE MI CUMPLEAÑOS

Otra vez se acerca el día de mi cumpleaños y otra vez, en las horas previas me encuentro solo y llorando.
No se bien por qué me siento así, porque además, me siento alegre, soy feliz.
Pero estoy llorando.
Es posible que sea porque este último año que culmina hoy mismo, ha sido de grandes cambios y de mayores descubrimientos.

Y tal vez sea porque por fin, estoy descubriendo quien soy.
¿Pero, entonces, eso quiere decir que no me gusta lo que he encontrado? ¿Por eso lloro?

No lo tengo claro. Pero, por otro lado, tampoco es algo que me preocupe.

Hace tiempo que vengo sintiendo cosas nuevas para mi. Hace tiempo que me apetece experimentar cosas nuevas, antes ocultas a la fuerza.

No se que haré a partir de mañana, desde ese primer día en el que mi vida la dirijo yo.

Tal vez es que como ahora me siento el dueño de mis deseos, lloro de alegría, por dejar atrás tanto tiempo de sufrimiento envuelto en las sombras de la duda, el pánico y la nula autoestima.

¿Por qué estoy así? No lo se, que más da. En serio. Procuro disfrutar de este sentimiento sin tener que encontrarle un porqué.
Ahora ya puedo. Ahora estoy preparado para salir al mundo.
Solo dudo si el resto del mundo estará preparado para mi.

No lo se. No me importa.